(San Isidro de El General, 26 junio del 2016) En horas de la tarde de este domingo 26 de junio dio inicio la Visita Pastoral a la Parroquia Nuestra Señora de la Candelaria en Potrero Grande, al ser las 3:00 pm nuestro obispo Mons. Montero se ha reunido con los niños y adolescentes que se encuentran en el proceso de catequesis del centro parroquial.
En este encuentro se contó con la presencia de los padres de familia, a quienes el obispo recordó lo importante que es su acompañamiento en el proceso, esto porque “los niños aprenden lo que ven de sus padres”; señalo que el Bautismo nos hace hijos de Dios, pero es necesario que los hijos puedan ver en sus padres testigos de fe.
“Los papás deben preocuparse de acompañar a sus hijos a la Iglesia” y encontrar en la Sagrada Escritura la voluntad y el querer de Dios; sólo “cuando el niño ve a sus padres que oran, que rezan en distintos momentos, aprenderá de ellos su devoción y se dará cuenta que Dios es importante”.
Señaló que la tarea es mostrar a nuestro Dios que tiene nombre y un rostro, es un Dios encarnado, es Jesús; por eso, “el niño ve a Dios, conoce a Jesucristo en su familia, en su casa, no en la Iglesia, porque en su casa las imágenes le hablan”, finalizó.
Posteriormente presidió la Eucaristía, en cuya homilía aplicó la segunda lectura del día a la realidad, recordando que muchas veces somos esclavos de los vicios y las drogas, realidades que están matando a los adolescentes, víctimas también de un comercio que enriquece a costa de sangre. Señaló que “la pérdida del sentido de Dios en la sociedad y la cultura costarricense tiene enferma a nuestra patria, urge volver a Dios, el seguimiento de Jesucristo es fundamental para poder superar esta enfermedad”.