Muchas son las historias que se conocen de camino rumbo a la Basílica de los Ángeles, también los romeros de Río Claro nos hacen crecer con testimonios llenos de fe y esperanza; por eso, Radio Sinaí 103.9 FM, quiere compartir con ustedes estos pasos de fe, donde unos caminan pidiendo incluso por desconocidos, a otros les mueve lazos familiares y a otros plegarias muy personales.
Así, en esta oportunidad, lo primero que nos enseñan estos peregrinos es que su caminar no es egoísta; por ejemplo, don Jimmy Acosta señaló que entre las razones que le motivan dirigirse a los pies de la Reina de los Ángeles está el elevar una plegaria por los hermanos nicaragüenses ante las situaciones difíciles que están viviendo, «pido a Dios que se pueda erradicar todo ese mal que está pasando en ese país», precisó.
Para María de los Ángeles Mora Bermúdez, su motivo de camino y las fuerzas que le sostienen, solo radican en agradecer a Dios por el milagro concedido, ella sabe que por la intercesión de María, su hermano superó el alcholismo, «yo pedí que por mi caminar María escuchara el clamor de mi madre que tanto ha pedido por su hijo, nosotras las madres sabemos que tenemos una madre intercesora, que la Virgen no se cansa y por eso madres como yo, no nos cansamos de rogarle a la Virgen Santísima por nuestros hijos, porque lo que es difícil para nosotros para Dios no lo es», relató aquella mujer que camina desde Curré.
Por otro lado, Trinidad Bolaños nos comentó que su peregrinación responde al agradecimiento que tiene luego de haber sufrido un accidente en su chapulín, «tuve afectadas todas las vértebras de mi columna pero por la intercesión de María estoy caminando otra vez, el año pasado tuve una romería muy triste porque no la pude hacer, estuve siete meses en una cama postrado donde no me podía valer por mí mismo», precisó.
Así, al conocer estos testimonios, los romeros nos quieren dejar dos consejos: primero, don Trinidad dice que quien pasa una situación difícil «debe tener mucha paciencia, mucha paz, eso es lo primero que uno tiene que tener, y luego que le pida de verdad, que lo pida de corazón a mamá María que ella interceda por nosotros»; segundo, este camino y la misma vida «no podemos hacerlo por nuestras propias fuerzas porque nos duele el cuerpo, pero el poder de saber que Dios es amor y misericordia nos hace seguir, por eso le pedimos al Señor que nos multiplique la fe, no las riquezas porque eso no es necesario, sino que nos dé lo que realmente necesitamos», indicó doña María Mora