Nació en Alemania el 28 de agosto de 1866, fue ordenado sacerdote en Quito Ecuador el 27 de diciembre de 1889. Junto con el Padre Krautwig abrió la misión en el sureste del país, se instaló en Térraba en 1900; posteriormente, se convierte en el primer párroco de Buenos Aires, muy posiblemente en 1904 según relato de Mons. Sanabria.
Joaquín Juliá periodista de la época lo describe así: «espíritu bien templado, rigiendo una voluntad y una musculatura de verdadero domador de hombres». Fue un sacerdote que se interesó por el aspecto religioso pero también por lo humano de los indígenas, hasta el punto de dirigirse al presidente de la República solicitando medidas eficaces para la solución de problemas de los pobladores. Su gran labor duró poco, pues en 1907 es trasladado a Honduras; no obstante, sus grandes proyectos realizados en lo que hoy es Ciudad Cortés, en donde tenía hacienda de trapiche, aserradero y máquina para pilar arroz, marcaron la vida de aquel pueblo, al punto que hoy la escuela de la localidad lleva su nombre.
Muere en septiembre de 1942 en Nicaragua.