Llamados a continuar el sacrificio doloroso de Cristo
El Mesías esperado, el nuevo Moisés, el siervo de Yahvé de Isaías, el cordero degollado, el redentor del mundo, y desde este madero, constituido rey de los judíos para siempre. Hoy nos hemos reunido como comunidad litúrgica para conmemorar este acontecimiento, la pasión y muerte de Jesús, el Cristo.